Saturday, May 09, 2009

JORNADA EN EL TAJO BRITÁNICO

Si había peor día para que tu madre te obligara ir al Tajo Británico (grandes almacenes) ése era hoy. Da igual que tengas trabajo urgente que realizar, que estés pariendo, o que te debatas entre la vida y la muerte. Si tu madre te dice alarmada como si hubiese un terremoto: "NO TENGO NADA EN EL ARMARIO", ta joío. Así empezó mi mañana, como si en el Tajo Británico pudiera encontrar algo. Primera parada, la planta de señoras. Odio la sección del "punto", toda llena de viejas dando codazos, acaparando ropas y dependientas, y yo pensando en que no me había tomado la pastillita especial para no matar viejas.
A esta situación de alteración nerviosa se une tener una madre como la mía. "Ese tejido es que no me gusta" "Eso es muy clásico" "Ese tipo de manga no me gusta", "Aquello es un horror", "Este color no me hace", "Como eso ya tengo 5 más" "es que yo quería algo así como, más así, pero sin ser así..." "este tipo de cuello es muy feo", "esto es demasiado de vestir para ir a trabajar" "esto es muy de sport y si tengo que ir arreglada a algún sitio" (si, coñe, al Baile de la Rosa!) "esto me queda fatal", para acabar con la frase de siempre "es que estoy muy gorda", mientras ves auténticas mesas camillas andantes que usan ropa, y te preguntas cómo que ellas encuentran algo que ponerse, y no les acompaña su hija!!!. Recuerdo que una dependienta un tanto contestona (y cansada) le soltó "no es que no tengamos ropa, señora es que Ud. es muy difícil". Luego viene lo de "mira que vestidito tan mono, yo de ti me lo compraría... y si te pones un par más de tallas de pecho te quedaría fenomenal". Qué manía mi madre en que parezca un clon de Pamela Anderson.
Afortunadamente hace un tiempo que yo me compro la ropa por internet. Sin agobios, y te lo traen a casa. Pero, lo siento chicas, hay que conservarse en una talla 38 para no tener sorpresas al probarse la ropa que te trae MRW. Tampoco es cuestión de quedarse en un pellejo como MariaTeresaFdezDelaVogue.
Tras llevarse al probador el mismo modelo de pantalón pero con distintos colores ("es que oscuros no quedan igual que claros", toma castaña!!), la dirigí a la cafetería y no dilatar más la toma de pastillita, y mientras comía urdía mi venganza. "Yo quiero unas botas, vamos a buscar botas". Te voy a hacer ver más zapatos que el armario de Imelda Marcos, y encima ahora es temporada de sandalias así que vas a recorrer el equivalente a la San Silvestre Vallecana en centro comercial.
Como no había nada que me gustase acabé comprando unas botas color rosa (creo que paso demasiado tiempo con Paris Hilton).
Me armaré de paciencia, pues tengo pendiente una cita como "personal shopper" con Pacobond. Creo que son unas 3 horas eligiendo camisa mientras habla por teléfono con sus clientes o despierta a compañeras de trabajo que dicen estar haciendo la siesta.

3 comments:

Anonymous said...

Si ir a comprar con una mujer ya es una putada -vamos a ver este otro, mira aquel, 5 euros menos...-, ir con tu madre ya es el acabóse. Hace ya un par de años largos que por no estar pegando más vueltas que un pollo de pollería por el centro comercial, cuando puedo ir con algún amigo o hacer una escapadita, voy, veo y venzo. Y au.

En, buah, 20 euros de media, me compro pantalones, zapatos, o lo que sea (casi siempre una pieza por viaje) y me cuesta 10 minutos. Me cuesta más hacer cola que comprarme la ropa. Y eso que voy a las cajas rápidas.

amelche said...

¿No puedes dejar a tu madre allí y largarte a otro sitio mientras? Mi madre se compra la ropa sola, menos mal. Además, creo que es un poco más rápida que la tuya, se prueba un par de cosas y, si le gustan, se las queda, y, si no, pasa y a otra cosa, mariposa.

Swyx: Conmigo puedes venir a comprar tranquilo, que si tú tardas diez minutos, te apuesto a que yo acabo en 5. Para eso, se ve que soy hombre, ¡ja,ja!

10050 Cielo Drive said...

Si, la dejo probándose cosas mientras yo miro trapos.
De todas formas, mi madre es rápida y veloz, con lo cual nunca llega a ver lo que le gusta porque siempre tiene prisas.
Y luego está que te llame alguna amiga para ver las tiendas de "trapos en cadena" y tirarte media tarde. Yo es que para mirar y no comprar, prefiero ver cosas bonitas aunque sean caras.